lunes, 26 de noviembre de 2012

Guarida

Y ahora es ahí donde estás, en el lugar donde el mar se une al campo y hacen de tu vista una incertidumbre dispersa ante tanta maravilla, los colores vívidos de tus ropas, no hacen más que querer desvestir al paisaje inmenso que te apabulla en su inmortal sendero, aún así, es ahí donde estás, escondida entre el viento y las hojas, entre el pasto y la tierra ...